Café Plató (Proyecto Construido)

Concepto

Plató Café fue mucho más que una mera iniciativa empresarial; encarnó la culminación de mi creatividad y pasión. Basándome en mi experiencia en la escuela de teatro, imaginé una experiencia de cafetería que transportara a los clientes al encantador ambiente de un set de filmación, permitiéndoles sentirse como estrellas. Este concepto se hizo realidad meticulosamente a través de elementos de diseño a medida, como luces focales hechas a medida, sillas de director, claquetas, cámaras de cine antiguas, rollos de película, rollos de tiras de película y vinilos con dibujos de un set de filmación, todo ello con un telón de fondo de techo abierto que exudaba un aire industrial. Mi objetivo general era crear un entorno inolvidable que dejara una marca indeleble en cada cliente.

Impulsado por un ferviente compromiso con la excelencia, me embarqué en un viaje marcado por una meticulosa atención a los detalles y una dedicación inquebrantable al servicio al cliente. Colaboré estrechamente con constructores y diseñadores gráficos, supervisando cada aspecto de la construcción y la implementación del diseño. A pesar de no tener conocimientos de dibujo técnico en ese entonces, me basé en bocetos preliminares y una comunicación clara para articular mi visión, un proceso que no solo alimentó mi creatividad, sino que también encendió una nueva pasión por el diseño de interiores comerciales.

Cada día era una inmersión en el proyecto, una labor de amor en la que ponía mi corazón y mi alma en cada detalle. Plató Café se convirtió en un niño metafórico, criado y educado con orgullo, que sirve como testimonio de mi capacidad para diseñar, gestionar y operar un café de forma independiente. Los valiosos conocimientos adquiridos a través de esta aventura influirán sin duda en mis futuras actividades profesionales, destacando el profundo impacto de la dedicación y el compromiso para alcanzar la grandeza.